sábado, 12 de junio de 2010

Dale un ritmo (splash!)

Levántate, no quiero verte. Continúa tu camino cual fantasma peregrino solicitando credenciales por todos los lugares, parajes, posadas, sitios singulares de costumbres y de gentes; lugares sorprendentes con poder para engancharte, someterte, apoderarse de tu mente, de tu tiempo y de tus ritmos más vendidos transformaos en alaridos. Competencia incompetente la que muestras espectante escuchando mis estrofas penetrándose en tu mente, y aquí sigues sonriente ... Pero recuerda lo que dije: levántate, no quiero verte

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

Mil pensamientos fluyen por mi mente, no de forma intermitente sino constante, permanente, cual movimiendo de serpiente, respetable, inconsistente, inquietante, impermutable, en ocasiones venerable. Y no paran de surgirme si tú despiertas mi mente, si me hablas y me gritas y me incitas a las rimas compartidas con suicidas de manera imperativa, no lasciva, expresiva, i ma gi na ti vA! Motivada por las penas de este mundo tan rastrero convertido en sumidero de cabrones y rateros motivados por dinero y perversos pensamientos ... retorceos y jodeos! Con mis rimas represento a la gente de la calle, a la que no dejais que hable, la que sufre en el silencio del "quiero pero no puedo", la que canta pa' su adentro ...

No hay comentarios:

Publicar un comentario